Justicia 2.0: La inteligencia artificial (IA) al servicio de los jueces

Justicia 2.0: La inteligencia artificial (IA) al servicio de los jueces

Justicia 2.0: La inteligencia artificial (IA) al servicio de los jueces

Justicia 2.0: La inteligencia artificial (IA) al servicio de los jueces. TIP LEGAL / No es ciencia ficción. En Colombia ya existen este tipo de tecnologías y son aplicadas a diario por operadores judiciales. Herramientas como “PretorIA” y “Fiscal Watson” les sirven de apoyo a los jueces colombianos para la revisión de tutelas y otras tareas complejas.

Estamos en la era de la justicia 2.0., sin embargo un operador judicial debe, no solo tratar de mantenerse actualizado dentro de una montaña de leyes, jurisprudencia, regulaciones y otros aspectos en permanente cambio, sino lidiar con la congestión judicial, la falta de recursos para el aparato judicial y la necesidad de impartir justicia, evitar o al menos reducir la impunidad y además mantener la reputación de esa rama del poder público, lo que hace evidente concluir que no es fácil ser juez en Colombia.

Ahora bien, esto puede cambiar. La inteligencia artificial (IA) aplicada a las decisiones judiciales podría convertirse en una pieza fundamental para marcar el camino de un cambio integral del sistema de justicia. Un sistema de IA posibilitaría a un operador judicial resolver algunos de los grandes problemas que aquejan al sistema.

En ese sentido, es posible vislumbrar que aplicar una IA a los textos normativos producidos en el país permite a un juez, con unos cuantos clics o mediante una pregunta simple, determinar si una norma es aplicable, conocer su estado de vigencia y conocer otras normas y jurisprudencia complementaria.

Incluso puede mostrar y argumentar sentidos de los fallos, apoyados en los datos y patrones encontrados.

Si bien estas tecnologías están diseñadas para alivianar la carga que implica la investigación jurídica necesaria para dictar un fallo, no significa que se esté dejando en manos de las máquinas las decisiones judiciales ni que se reemplazará a los jueces por robots.

Al respecto, en el mundo se han establecido criterios éticos para el uso de la IA, buscando las decisiones que pueda tomar, siempre y cuando sean autorizadas o avaladas previamente por un humano.

Estas iniciativas, como aquella de la Unión Europea llamada “Inteligencia artificial: requisitos legales y éticos” y el muy reciente “Marco Ético para la IA en Colombia”, imponen la necesidad de la validación humana de las opciones o conclusiones que puedan ser encontradas por una IA, en especial cuando se trate de programas cuyas conclusiones o decisiones signifiquen un cambio del estado de los derechos de una persona.

Esto no es ciencia ficción. En Colombia ya existen este tipo de tecnologías y son aplicadas a diario por operadores judiciales.

El “Fiscal Watson” es una herramienta de IA que permite buscar coincidencias de manera automática entre millones de registros. Gracias a esto, la Fiscalía ha podido encontrar patrones y asociaciones en casos que aparentemente no lo tenían, y eran casi imposibles de detectar por un equipo humano.

Este software ha ayudado a resolver casos que de otro modo habrían pasado inadvertidos o habrían tardado años en ser resueltos. Por ejemplo, en noviembre de 2018 un taxista y su cómplice fueron cobijados con medida de aseguramiento por 22 conductas delictivas similares en Medellín con al menos 36 víctimas. Fueron señalados como presuntos responsables de haber utilizado siete taxis de una misma empresa para realizar diferentes delitos cuya cuantía se calculó en 200 millones de pesos, un patrón casi imposible de determinar, sin la ayuda de esa IA.

Así mismo, la Corte Constitucional colombiana implementó un programa piloto denominado “Prometea” (hoy evolucionado como “PretorIA”), una iniciativa de origen argentino.

El software “PretorIA” ayuda a los jueces y operadores de la Corte a elegir, entre cientos de millas de tutelas en temas de salud, aquellas que deben ser debatidas por esa institución. Un proceso que se hace en segundos, en el lugar de las horas que tarda un operador humano y con mayores niveles de precisión.

Son los primeros pasos para llevar al sistema judicial a otro nivel: la tecnología al servicio de la transparencia y la equidad. Eso es La Justicia 2.0.

* Abogado, director del área de Legaltech & Compliance en Moncada Abogados, consultor para empresas y personas del sector tecnología, infraestructura y comercio. Magíster en Contratación Pública y Privada de la Universidad Santo Tomás y PhD en Ciencias Políticas, de la Comunicación y del Lenguaje de la Universidad de Salerno, Italia.

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